Después de casi 10 dÃas de campaña, los polÃticos siguen estancados en una estrategia de demasiadas palabras y pocos hechos, o lo que es lo mismo mucho trending topic y pocas propuestas sobre la mesa. Cuando no es el vÃdeo sorpresa de Mariano, es el UyPD y el debate, la corrupción de Llamazares o el jet privado de Blanco. Se les llena la boca con su aparición en las redes mientras Soria tuitea su visita a todos los municipios de las Islas papeletas en mano, pero a la hora de la verdad se habla mucho, pero se hace poco.
Ya en el comienzo de la precampaña se le criticó al equipo de Mariano que sus perfiles en las redes sociales no conversaban con nadie, pero sà expulsaban propaganda sin lÃmite. Las mismas crÃticas alcanzaron a Rubalcaba que además fue increpado por no estar nunca detrás de las opiniones lanzadas. Ambos aprendieron la lección: la cuenta del lÃder popular ya contesta y Rubalcaba ha optado por firmar los tweets.
El pasado viernes el candidato socialista incluso decidió -bajo la etiqueta #yorespondo- contestar a las preguntas de los internautas en directo a través de webcam, eso sÃ, el turno de preguntas se cerraba la noche anterior para que Rubalcaba pudiese contestarlas bien masticaditas y después de unos cuantos filtros. Y aún fingen ante quién está leyéndoles desde sus casas que son ellos quiénes responden.